Descubre la temporada 2019-2020 de Opera y Ballet en San Petersburgo !

¡La espléndida ciudad de San Petersburgo le espera para ofrecerle una experiencia musical inolvidable!

El Teatro Mariinsky, la sala de conciertos Mariinsky y el Festival de las Noches Blancas son imprescindibles para todo melómano.

¡Reserve con antelación sus entradas de ópera y de ballet para San Petersburgo!

 

 

Un poco de historia ...

San Petersburgo fue fundada en 1703, cuando fue colocada la primera piedra de la fortaleza de San Pedro y San Pablo. En 1706, el zar Pedro el Grande decidió convertir a San Petersburgo en su capital.

En 1712, el senado, las embajadas y la corte fueron trasladadas a San Petersburgo. Las familias nobles de Moscú comenzaron a emigrar a la nueva capital. Pedro el Grande hizo venir a muchos arquitectos europeos para diseñar la ciudad.

Bajo el reinado de la emperatriz Catalina II, San Petersburgo se desarrolló rápidamente: ella hizo erigir diversos palacios, 25 academias (entre ellas el instituto Smolny) y la primera escuela pública para mujeres.

En 1738 se fundó la primera escuela de ballet ruso y el Teatro Mariinsky abrió sus puertas en 1783. Los intelectuales y escritores como Alexandre Pouchkine se reunieron en San Petersburgo.

Tras la revolución de 1917, tan solo quedó un tercio de los dos millones de habitantes de San Petersburgo. La ciudad fue rebautizada como Leningrado en 1924. El centro de la ciudad fue abandonado y se desplazó al sur, en torno a la Plaza Moscú.

 

Durante la Segunda Guerra Mundial, Leningrado fue asediada por los alemanes entre 1941 y 1944. En esos años, el hambre y los bombardeos se cobraron muchas muertes: 1,2 millones de civiles murieron en este periodo.

Tras la guerra, la ciudad fue reconstruida. Simboliza la resistencia soviética, pero existe una lucha de poder con Moscú.

Con motivo del 300º aniversario de la ciudad, en 2003, la ciudad suscitó un nuevo interés internacional. Los edificios antiguos fueron restaurados.

 

¿Qué hacer en San Petersburgo?

 

La ciudad cuenta con numerosos museos, como el Museo del Hermitage. Formado por seis edificios, el museo alberga distintas colecciones, entre ellas una colección de pinturas que iguala a la del Louvre.

 

Majestuosa, San Petersburgo está atravesada por largos bulevares rectilíneos, e inundada de palacios y de parques. Visite la fortaleza de San Pedro y San Pablo, compuesta por numerosos edificios, como la preciosa catedral de Pedro y Pablo.

La iglesia del Salvador sobre la Sangre Derramada, terminada en 1903, es una visita obligatoria. Es un homenaje al emperador Alejandro II, asesinado en un atentado. El edificio contiene más de 7500m² de mosaicos que realmente vale la pena ver.

Visite la plaza del Palacio, que le ofrecerá unas vistas grandiosas. No deje de entrar en el palacio de Invierno y en la casa de Alexandre, donde le embriagará el encanto.

 

¡San Petersburgo, ciudad melodiosa!

 

El grandioso Teatro Mariinsky, la ópera de San Petersburgo y la Sala de conciertos Mariinsky proponen un programa de calidad, al igual que el Festival de las Noches Blancas de San Petersburgo, celebrado anualmente en mayo-junio.

 

Construido en 1860 en el lugar del antiguo Teatro Circo, el Teatro Mariinsky se convirtió rápidamente en una referencia mundial. La antigua pista y las gradas del teatro fueron utilizadas en la construcción del Teatro Mariinsky, lo que hace que tenga una forma poco convencional. Mese a su forma convencional en U, el escenario es enorme en comparación con otros teatros de la época, por lo que ha revolucionado la utilización del espacio en las coreografías.

 

Es en el Teatro Mariinsky donde se han estrenado numerosas grandes óperas rusas, como las de Chaikovski, Músorgski, Borodine, etc. Pero el teatro es conocido sobre todo por su cuerpo de ballet.

El ballet ruso, caracterizado por su duración que supera las dos horas y por su aspecto “espectacular”, fue inventado en el Mariinsky. El Teatro Mariinsky es una referencia mundial de la danza.

Tras la Revolución Rusa de 1917, el Teatro Mariinsky perdió su esplendor. Fue renombrado como Teatro del estado de la ópera y del ballet en 1920, y posteriormente como Teatro Kirov, en 1934. Pese a su escuela de danza de una calidad indiscutible, los alumnos se marchaban al Bolshoi o a occidente.

 

El Teatro Mariinsky recuperó poco a poco su prestigio tras la llegada de Valery Gergiev a su dirección. Actualmente, existen ambiciosos proyectos de renovación.

 

La Sala de conciertos Mariinsky abrió sus puertas al público en 2007. La sala de conciertos se realizó al estilo de los antiguos talleres, replicando los vestuarios y elementos decorativos que se incendiaron en 2003. Pese a conservar su fachada histórica, la sala de conciertos aúna historia y modernidad en su estructura.

Además de orquestas rusas, numerosas escuelas extranjeras visitan la Sala de conciertos Mariinski, como la London Philharmonic Orchestra o la Munich Philharmonic Orchestra.

 

¿Qué sería de San Petersburgo sin su Festival de las Noches Blancas? Tradición a partir de 1993, el Festival se desarrolla entre mayo y junio. Las representaciones tienen lugar tanto en el Teatro Mariinsky como en la Sala de conciertos Mariinsky.

 

San Petersburgo es una ciudad magnífica, que respira historia y música. Esta extraña joya le espera. No espere más, reserve sus entradas de ópera en San Petersburgo.

¿O acaso prefiere un ballet en el Teatro Mariinsky?